COMUNICACIÓN EFECTIVA EN LA RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE
BASADA EN LA COMUNICACIÓN NO VIOLENTA (C N V ) DE MARSHALL ROSENBERG.
El
médico a su paciente: “bueno, María, ya le he
examinado su corazón y pulmones... todo está bien... ahora me va permitir revisar esa cosita que tienen
ustedes, las mujeres, y que las mete en tantos líos” Paciente: “¡Doctor... no sea grosero!”. Dice la paciente. - mientras comienza
a ponerse la ropa..
“No
señora, lo que quiero es que saque la lengua” le advierte el médico.
Cuando leí el libro LA COMUNICACIÓN NO VIOLENTA, de Marshall Rosemberg, pensé
que este modelo podría aplicarse
como herramienta a la relación médico-paciente (R M P), por lo que he
tratado de adaptarlo a las situaciones de dicha relación.
Premisas:
- Nuestra relación con el paciente debe
ser honesta y empática.
- El objetivo de nuestra comunicación con
el paciente solo debe ser el bienestar de este.
Ambas premisas son
requisitos I N D I S P E N S A B L E
S en la R M P, sin ellas estamos
condenados al fracaso como médicos. Podríamos triunfar en otras áreas, como la financiera, científica o de prestigio
social, pero nunca como médicos.
Recordemos que el
médico se verá asechado, engañado, constantemente por conflictos de intereses que
tendrá que identificar y resistir.
Rosemberg define 4 componentes en la comunicación no
violenta:
1)
Observar
2)
Revisar nuestros propios sentimientos
3)
Revisar cuales son las necesidades reales
4)
Qué esperamos que haga la(s) otra(s) persona(s).
OBSERVAR
OBSERVAR SIN EVALUAR, sin llegar a una conclusión y comunicarle
al paciente lo observado, por ejemplo: “veo que está usted inquieto, tembloroso,
callado” ¿es cierto?”... (son palabras que describen nuestras observaciones) en
lugar de decirle: “estas nervioso o molesto” (son palabras que indican una
conclusión o evaluación). Lo importante de esta aserción es que le comunicamos
al paciente, de forma sincera y
objetiva, por qué llegamos a nuestra evaluación, para que entienda nuestra posición y actitud.
Así tendrá la oportunidad de negar o reconocer
nuestra evaluación. De lo
contrario corremos el riesgo de influir en su estado de ánimo y en la
información que nos pueda dar. Si le decimos: “estas
asustado” o “molesto”, corremos el riesgo de asustarlo de verdad o de
ponerlo a la defensiva. Si le explicamos lo que observamos el paciente sabrá
por qué llegamos a una conclusión y nos va a ayudar, aportándonos más información sincera.
IDENTIFICAR Y
EXPRESAR NUESTROS SENTIMIENTOS
La dificultad que tengamos de expresar nuestros sentimientos y emociones deteriora la comunicación en buena medida.
Fijémonos que cuando nos comunicamos con
mensajes de texto por
teléfono, muchas veces no captamos bien
las necesidades de la persona con la que nos comunicamos, porque le falta la
expresión afectiva.
Un ejemplo:
Paciente hostil:
Médico,
mirándolo de frente, a los ojos: “Buenas,
yo soy el Dr. Tal, (trato de darle
la mano) y vengo a ponerme a su orden... ¿usted cree que puedo ayudarlo en algo?”
Paciente:
“No... y ¿por qué me va a ayudar?...”
Médico:
“bueno, como veo que lo han traído
sus familiares y están gritando y usted está inquieto, pienso que debe estar incómodo...”
Le manifiesto lo que estoy
observando y a la conclusión que llego, por lo que observo.
Paciente:
“...ellos son los que están locos...”
Médico: “y por ¿qué cree usted que están locos?”
Paciente:
“no jod... no ve como me trajeron... a los coñ...”
Médico:
“a lo mejor le tienen miedo...”
Paciente:
“y ... ¿Por qué me van a tener miedo?”
Médico
(siempre mirándolo a los ojos): “...
yo tengo miedo”
Le expreso mi emoción, para que él
tenga conocimiento de como me siento y haga empatía conmigo. Suelen bajar el
tono cuando saben que con su actitud meten miedo, pero existe la pasibilidad de
que se envalentone y se ponga arrogante*.
El
paciente, puede responder de 2 maneras: A) “¡No!, si yo no le voy a hacer
nada a usted”. B) Otra posición del
paciente sería: “Entonces no se meta con
migo si no quiere que lo jo...”
Médico
ante la respuesta “ A”: “Ah, que bueno, me alivia que me lo diga.” O ante la respuesta “B” : “no señor, no lo voy molestar...pero gracias por advertírmelo” (sin
dejar de verlo ni de prestarle atención)
Le manifiesto una emoción de
gratitud y alivio, lo cual refuerza la actitud empática del paciente hacia mi y
seguro tendré más oportunidad de ganar su confianza. Reconocer y expresar nuestras emociones, sentimientos
y estados de ánimo de forma transparente, es importante para una efectiva
comunicación con nuestros pacientes, los acerca más a nosotros y se sienten con
más confianza para darnos una información más honesta. Por ello es conveniente
que tengamos un repertorio de gestos y palabras que nos ayuden a comunicar nuestros afectos.
Cuando el paciente está
francamente psicótico es inoperante contradecirlo y se hace necesario entrar en
su delirio.
*”puede que en algunas
ocasiones la misma empatía del médico sea una fuente de malestar para el
paciente (sobre todo pacientes con trastornos mentales, con pobre juicio de
realidad)...
...Hay
algunos pacientes por ejemplo, que aunque parezcan sufrir un considerable dolor
psicológico, se sienten humillados si se constata ese dolor. La apreciación
empática de su dolor (o falta de introspección) por parte del terapeuta la viven como un ataque... en tales
situaciones cuando el temor del paciente a ser tan débil o vulnerable hace que
la empatía parezca un enemigo, es útil que se considere cómo se podría
incorporar la expresión misma de empatía dentro de una estrategia que a la vez
acepte y trabaje para cambiar la visión que el paciente tiene del mundo. Básicamente se empieza por ªempatizarª con la resistencia, con la insistencia del paciente
para que no se hable de su malestar, con su irritación cuando se trata de su
malestar. El comentario podía se simplemente ya
veo que no te gusta que se te diga que estas sintiendo dolor. (voy a respetar eso, si así lo
prefieres) ... El siguiente paso en el
proceso interpretativo... podría ser te
sientes incómodo con la idea del sufrimiento?. Estos párrafos sombreados son tomados
textualmente del libro La comunicación terapéutica de Paul Wacthtel y los comentarios entre
paréntesis son nuestros.
ASUMIR LA
RESPONSABILIDAD DE NUESTROS SENTIMIENTOS Y SABER CUALES SON LAS NECESIDADES
REALES
Las emociones surgen de nuestras necesidades. Las emociones
nos mueven a satisfacer las necesidades, por lo tanto ambas deberían ser
congruentes. Si necesitamos defendernos
sentiríamos miedo o ira. Pero entre
necesidades y emociones existen nuestras
cogniciones: pensamientos, ideas,
imágenes, juicios, razonamientos o recuerdos .
“A los seres humanos
no les turban las cosas en sí, sino como las ven”. Epícteto,
filósofo griego de la escuela estoica, hace 2000 años.
Una comunicación efectiva tiene que ver con revisar cuales
son las necesidades reales y asumir la responsabilidad de nuestras emociones y
nuestros actos e investigar cuales son las necesidades y sentimientos de la
otra persona.
Cuando alguien nos transmite un mensaje negativo, (verbal o
gestual) temos cuatro opciones,
1) tomárnoslos de forma personal,
captando en él acusaciones y críticas. Por ejemplo, el familiar de un paciente nos dice: “usted como que no sabe lo
que está haciendo, doctor” y nos sentimos avergonzados, tristes y culpables.
2)
desmentir la acusación, nos
enfadamos y contestamos airadamente: “no me
falte el respeto... salga de aquí o llamo a seguridad”.
3)
Revisar cuales son nuestros sentimientos
y necesidades. ¿Qué es lo realmente me molesta de la situación? ¿Qué me descalifique sin conocer realmente mi preparación? En este
caso podríamos preguntarle “ ¿por qué lo dice... no se da cuenta que con su
actitud me molesta e impide una buena relación?”
4)
tratar de evaluar los sentimientos y necesidades de la otra persona y preguntarle: “¿se siente usted muy
preocupada por la salud de su familiar, verdad? ... eso lo entiendo, si usted
lo desea puede llamar a otro médico... no me voy a incomodar por eso, mientras
tanto, le aseguro que pondré todo lo que
esté de mi parte para ayudarlos”. Con está actitud le estamos poniendo en
contacto con sus emociones y sus necesidades reales.
LO QUE QUEREMOS PEDIR
AL OTRO
Llega a su casa el paciente, revisa las indicaciones del médico y
extrañado le dice a su esposa: “no
entiendo como me voy a hacer el tratamiento... aquí dice: “introducir un supositorio
por el recto” . llamaré al médico para que me lo explique: “aló dr.
disculpe, pero como es que me voy a
tomar el tratamiento? “ Médico: “se lo va a introducir por el ano” Pero el paciente todavía no entiende y le pregunta a su
esposa, pero ella tampoco sabe y le
recomienda que lo llame de nuevo. El paciente
le dice “es que se puede molestar si lo
vuelvo a llamar” La mujer insiste en que lo llame de nuevo y el paciente vuelve
a llamar al médico: “perdone, doctor,
pero no entiendo como es que me voy a tomar el tratamiento” Médico: "métaselo por el culo”
El
paciente cuelga el teléfono y le dice a la esposa: “yo sabia que se iba a
molestar”
Toda necesidad provoca una emoción, esta emoción
produce un acto (conducta) a través de nuestras cogniciones, Riso. W
(2006). Esta secuencia es importante tenerla
en cuenta para una adecuada comunicación.
ESTÍMULO -à NECESIDAD ---à COGNICIÓN ---à EMOCIÓN---à CONDUCTA
Cuando pedimos algo debemos expresar con claridad nuestras necesidades y nuestros sentimientos, pero sobre todo debe quedar bien claro la
conducta que esperamos de la otra
persona, esto lo llama Rosenberg “lenguaje de acción positiva”. Una petición
negativa es solicitar algo que no queremos que se haga, esta solicitud se
presta a confusión. Si le digo a un paciente: “no quiero que se acueste de lado”, éste se puede acostar de-cúbito
supino (boca arriba), de cúbito prono
(boca abajo) o no acostarse. Pero si le digo: “quiero examinar su espalda (le expresamos nuestra necesidad) por favor acuestese boca abajo” tiene una
sola forma de acostarse, por lo tanto
hay que evitar las peticiones negativas.
Si queremos lograr que el paciente haga lo correcto,
debemos explicarle los motivos por los cuales le estamos haciendo esas
indicaciones. Los motivos por los cuales
le hacemos las indicaciones son las
necesidades. Por ejemplo: “mire, le
estamos solicitando estos exámenes porque queremos descartar tal o cual
enfermedad... “ y si le decimos que necesita descansar se le explica el
motivo. Igual hacemos con el tratamiento.
Al preguntar si comprendió estamos averiguando qué piensa el
paciente, cuales son sus
cogniciones. Le
pediremos que él nos explique qué
entendió y qué va a hacer. Podríamos decirle algo como: “me gustaría que me dijeras si crees que esto te va a servir” o “me gustaría que me dijera si esto era lo qué usted esperaba” para saber si el paciente tiene algunas dudas
todavía, si va a cumplir con el
tratamiento y si se cumplieron sus expectativas.
Recomendamos estudiar el trabajo RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE en este mismo blog.
Recomendamos estudiar el trabajo RELACIÓN MÉDICO-PACIENTE en este mismo blog.
Bibliografía Rosemberg, M. (2011) Comunicación no violenta. Ed. Acanto, Barcelona. Riso, W. (2006) Terapia cognitiva. Ed Norma Bogotá. Wachtel, P. (1996) La comunicación terapéutica. Principios y práctica eficaz. Ed. Desclée. Bilbao.
Rosemberg, M. (2011) Resolver los conflictos con la comunicación no violenta. Editorial Acanto, Barcelona.
Riso,W. (2004) Pensar bien sentirse
bien. Norma, Bogotá.
Riso,W. (2006) Terapia cognitiva.
Norma, Bogotá
Wachtel