jueves, 26 de noviembre de 2009

D U E L O



D U E L O
FISTERRA.com
Autor: Víctor Landa
El duelo humano se define como una reacción adaptativa natural, normal y esperable ante la pérdida de un ser querido.
Suele ser un acontecimiento vital estresante de primera magnitud, que tarde o temprano hemos de afrontar. En la CIE 10 se codifica Z63.4








La enorme variabilidad del duelo depende de:
Las características de la persona en duelo,
 su situación personal y antecedentes,
 “quien” es la persona fallecida para el doliente,
 las causas y circunstancias de su fallecimiento,
 las relaciones y apoyo socio- familiares
 las costumbres sociales, religiosas, etc.
 situación económica, no necesariamente financiera
 servicios de atención sanitaria disponibles
Se puede describir a grandes rasgos la evolución del duelo a lo largo del tiempo: FASES DEL DUELO
 Duelo anticipado (pre-muerte)
 Duelo agudo (muerte y peri-muerte)
 Duelo temprano
 Duelo intermedio
 Duelo tardío
 Duelo latente

Duelo anticipado (pre-muerte):
Es un tiempo caracterizado por el shock inicial ante el diagnóstico y la negación de la muerte próxima, mantenida en mayor o menor grado hasta el final; también por la ansiedad, el miedo y el centrarse en el cuidado del enfermo.
Este período es una oportunidad para prepararse psicológicamente para la pérdida.
Deja profundas huellas en la memoria.
Duelo agudo (muerte y peri-muerte): Son momentos intensísimos y excepcionales, de verdadera catástrofe psicológica, caracterizados por el bloqueo emocional, la parálisis psicológica, y una sensación de aturdimiento e incredulidad ante lo que se está viviendo. Es una situación de auténtica despersonalización.
Duelo temprano: Desde semanas hasta unos tres meses después de la muerte. Es un tiempo de negación, de búsqueda del fallecido, de estallidos de rabia, y de intensas oleadas de dolor y llanto, de profundo sufrimiento. La persona no se da cuenta todavía de la realidad de la muerte
No es raro que el doliente sueñe que el difunto le da mensajes o incluso lo vea o lo oiga. Son fenómenos completamente normales, similares al fenómeno del “miembro fantasma”
Duelo intermedio: Desde meses hasta años después de la muerte. Es un tiempo a caballo entre el duelo temprano y el tardío, en el que no se tiene la protección de la negación del principio, ni el alivio del paso de los años.

Es un periodo de tormentas emocionales y vivencias contradictorias, de búsqueda, presencias, culpas y autorreproches,... donde continúan las punzadas de dolor intenso que llegan en oleadas.
Percibiendo progresivamente la realidad de la pérdida, apareciendo múltiples duelos cíclicos en el primer año (aniversarios, fiestas, vacaciones...) y la pérdida de los roles desarrollados por el difunto. También un tiempo de soledad y aislamiento, de pensamientos obsesivos,... Se va descubriendo la necesidad de descartar patrones de conducta previos que no sirven (cambio de estatus social) y se establecen unos nuevos que tengan en cuenta la situación actual de pérdida.
Este proceso es tan penoso como decisivo, ya que significa renunciar definitivamente a toda esperanza de recuperar a la persona perdida.
Finalmente los períodos de normalidad son cada vez mayores. Se reanuda la actividad social y se disfruta cada vez más de situaciones que antes eran gratas, sin experimentar sentimientos de culpa.
El recuerdo es cada vez menos doloroso y se asume el seguir viviendo.
Varios autores sitúan en el sexto mes el comienzo de la recuperación, pero este período puede durar entre uno y cuatro años.
Duelo tardío: Transcurridos entre 1 y 4 años, el doliente puede haber establecido un nuevo modo de vida, basado en nuevos patrones de pensamiento, sentimiento y conducta que puede ser tan grato como antes, pero sentimientos como el de soledad, pueden permanecer para siempre, aunque ya no son tan invalidantes como al principio. Se empieza a vivir pensando en el futuro, no en el pasado.
Duelo latente (con el tiempo...) A pesar de todo, nada vuelve a ser como antes, no se recobra la mente preduelo, aunque sí parece llegarse, con el tiempo, a un duelo latente, más suave y menos doloroso, que se puede reactivar en cualquier momento ante estímulos que recuerden...

Predictores de malos resultados o de dificultades en la elaboración del duelo
1. Muertes repentinas o inesperadas; circunstancias traumáticas de la muerte (suicidio, asesinato).
2. Pérdidas múltiples o pérdidas inciertas (no aparece el cadáver).
3. Muerte de un niño o adolescente.
4. Muerte tras una larga enfermedad agónica
5. Doliente demasiado dependiente; relación ambivalente o conflictiva con el fallecido.
6. Historia previa de duelos difíciles
7. Vivir sólo; poco apoyo sociofamiliar real o sentido; alejamiento del sistema tradicional socio-religioso de apoyo (emigrantes).
8. Crisis concurrentes, laborales, económicas, judiciales....
Duelo complicado
Cuando se presentan síntomas psicopatológicos importantes como ideas delirantes (persecutorias, nihilistas, etc.), alucinaciones, pensamiento suicida, insomnio pertinaz, anorexia con peligro de mal nutrición, agresividad y/o violencia con peligro de daño a terceros y deterioro de las actividades sociales.
En estos casos se debe vigilar a la persona y referirla a la emergencia para que sea tratada por un especialista, quien decidirá su hospitalización o tratamiento ambulatorio, de acuerdo a la gravedad del caso.
Técnicas de Cuidados Primarios de Duelo
Perfil del duelo: recoger datos básicos:
I -sociofamiliares: genograma, relaciones familiares, amigos, situación económica, etc.
II-Antecedentes personales: problemas de salud psicofísicos, elaboración de posibles duelos previos, coincidencia de otros problemas
III- Evolución del proceso del duelo: causa y lugar del fallecimiento, conocimiento de la enfermedad, sentimientos que manifiesta como añoranza, culpa, rabia, ansiedad, tristeza, etc. y apoyo emocional de la familia.
Relación (R), Escucha (E), Facilitación (F), Informar (I), Normalizar (N), Orientar (O).
R E F I N O
(FISTERRA.com Autor: Víctor Landa )
R= Relación empática con el doliente
Mantenerse dentro del marco profesional establecido. Subrayando las características profesionales de la relación para evitar malos entendidos y reacciones de transferencia-contratransferencia dramáticas (Ej. evitar ser un “sustituto interino” del que falta).
E=Escucha activa. La escucha activa es atenta, centrada e intensa; es una escucha del otro y de uno mismo. Debemos tener en cuenta, que nos podemos impregnar de los sentimientos del doliente y saber que son de él… no nuestros.
F=Facilitación. Facilitar es favorecer la comunicación, esperar, tener paciencia, es también hacerle un espacio al otro (al doliente) y darle “permiso” con nuestra actitud y ese clima “seguro” que hemos creado, para que cuente lo que se le ocurra o exprese sus emociones más profundas:
La tristeza, culpa, miedo, amor y alegría, serán partos más o menos fáciles, solo hay que estar y no interrumpir; mientras que la rabia siempre será un parto difícil.


I=Informar. Informar al doliente es:
Explicarle lo que hoy define la psicología occidental como el constructo duelo, pero siempre volviendo a insistir que lo suyo es “único” y que tiene permiso para sentir lo que quiera y cuando quiera.
Aclararle que la evolución teórica del proceso es hacia el ajuste, que todos los seres vivos se adaptan instintivamente a las nuevas situaciones
Orientarle sobre las dudas más habituales: “¿Es bueno ir al cementerio?, ¿y llorar...?, ¿y hablar siempre del muerto...?, ¿porqué ahora no me fío de nada ni de nadie, y por qué me parece todo distinto?, ¿porqué ahora tengo más miedo de morirme y a la vez quiero morirme?
N=Normalizar. Normalizar es asegurarle al doliente –y se lo está diciendo su médico- que lo que siente, piensa, hace... es totalmente normal y lo natural en su situación... Esto valida sus reacciones y sentimientos, los legitima, confirma, desculpabiliza y además puede seguir sintiéndolos.
• Cuando normalizamos es mejor tomarnos tiempo y tener en cuenta la cadencia del encuentro; controlando nuestra reactividad,... dejando transcurrir un tiempo entre el estímulo del doliente y la respuesta que damos.
• Normalizaremos especialmente, que no se quiera olvidar, ni dejar de llorar... que se continúe hablando con él (ella) o que se refiera a él (ella) en presente…
O=Orientar. Orientar es guiar, sugerir, aconsejar... o incluso prescribir mediante instrucciones concretas determinadas conductas o rituales, y a veces lo contrario; por ejemplo, disuadir de una decisión precipitada,...
• “quiero vender esta casa”, “creo que aquí no puedo vivir”, “son muchos recuerdos, entro en casa y el mundo se me viene encima...”. Como orientación general, desanimamos la toma de decisiones importantes durante el primer año, pero a la vez fomentamos la toma independiente de decisiones menores
. También podemos asesorar en la reorganización familiar, explicando que la pérdida de uno de los componentes de la familia lo trastoca todo,... interacciones, roles, espacios, normas, autoridad, poder, economía,... todo se tiene que renegociar y reconstituir.
. El objetivo sería reestructurar la cotidianeidad con conductas saludables. Para empezar se puede prescribir salir todos los días a la compra, andar un rato, sacar a pasear el perro,... esto le obliga a resocializarse a la vez que realiza una actividad saludable. Debemos evitar maneras de afrontar la pérdida, claramente perjudiciales como, el sedentarismo, horas de televisión, el juego, el abuso de alcohol, tabaco...
No es recomendable la prescripción rutinaria de ansiolíticos, que muchas veces son exigidos por la familia.
Recuérdeles que el duelo es una reacción adaptativa natural y normal.
Solo si el duelo se complica se prescribirán fármacos .
Si el doliente lo desea se le puede recomendar libros de autoayuda:
"La muerte: un amanecer" de Elisabeth Kübler-Ross, Luciérnaga, Barcelona 1991
“El camino de las lágrimas” de Jorge Bucay, Grijalbo, Barcelona 2003
Etc. En Internet cada vez hay más recursos para las personas en duelo. Desde los “chats" de autoayuda en duelo hasta los cibercementerios.

MECANISMOS DE DEFENSA

                                                                                                                                      


 Los Mecanismos de Defensa son procesos  psicológicos automáticos  que protege al individuo de la ansiedad y de la conciencia de amenazas o peligros externos o internos. Los mecanismos de defensa mediatizan la reacción del individuo ante los conflictos emocionales y ante las amenazas externas.
Los mecanismos de defensa son funciones psíquicas reguladoras. Su misión dentro del psiquismo es la de regular las cargas de energía (disminuyendo la tensión psíquica) para "proteger" el equilibrio y evitar toda clase de trastornos o perturbaciones producidas por exceso de excitación emocional.
Unos son más sanos y adaptativos y permiten al sujeto superar el estrés con mayor fortalecimiento de su personalidad, al corregir los propios errores. Otros son menos adaptativos, no resuelven los problemas de fondo. Son solo paliativos que no permiten a la persona crecer, ni corregir sus errores. Otros son francamente patológicos.

MECANISMOS DE DEFENSA  ADAPTATIVOS.

 ANTICIPACIÒN: El individuo, ante una amenaza interna o externa o ante un conflicto, anticipa las consecuencias y considera de forma realista las soluciones alternativas. Es el ejemplo de las personas que ante la inferencia de eventos difíciles a corto plazo (climatológicos, económicos, problemas de salud, entre otros) se adelanta a los hechos y planea por adelantado las posibles soluciones.
 AUTOAFIRMACIÓN: El individuo se enfrenta a sus conflictos emocionales expresando directamente sus sentimientos de forma no manipuladora.
 SUBLIMACION: es considerado uno de los mecanismos de defensa más positivos para la descarga de las tensiones La sublimación viene a ser como un medio de alcanzar satisfacción en forma sustitutiva o imaginaria a las dos tendencias básicas de nuestros instintos: la sexualidad y la agresividad. Se trata de un tipo de comportamiento o conducta en el que las tendencias, los impulsos, los instintos, deseos, etc. que son moralmente y culturalmente rechazados por la conciencia y por la convivencia social se descargan canalizando su energía en torno a comportamientos socialmente aceptables y que se justifiquen por el beneficio a la comunidad. Todas las actividades científicas, deportivas, artísticas, intelectuales, religiosas y culturales, en general, son consecuencia de la sublimación según Freud. Un ejemplo de sublimación relacionada con el deporte, sería la de un joven violento que disfruta con las peleas y se dedica entonces a la práctica del boxeo, o el joven que se deleita con los actos rudos y se desempeña como jugador profesional de fútbol americano.
 AFILIACIÓN: El individuo, ante una amenaza interna o externa, busca ayuda y apoyo en los demás. Es el caso de las personas que forman grupos con diversa finalidad, tales como: asociaciones de vecinos, juntas de condominio, gremios laborales, grupos religiosos, asociaciones deportivas. En el caso de los enfermos y sus familiares se pueden mencionar los grupos de ayuda mutua, las asociaciones de enfermos renales, las asociaciones de enfermos de cáncer, las asociaciones de personas infectadas con VIH, alcohólicos anónimos, asociaciones para personas autistas y sus familiares, asociaciones para personas con retraso mental y sus familiares, etcétera, que se constituyen para la búsqueda de soluciones, mediante la colaboración de todos los miembros del grupo, compartiendo de ésta forma tanto la ansiedad como las gratificaciones con respecto a sus necesidades, aspiraciones o problemas comunes.

MECANISMOS DE DEFENSA  PALIATIVOS.

 REPRESIÓN: puede considerarse como el “aprisionamiento” en el subconsciente de recuerdos, ideas, emociones, etc. cuya exteriorización a través de la conciencia está impedida por las barreras psíquicas de la censura. Por ejemplo, la atracción sexual, o el odio hacia el padre o la madre, o hacia un hermano o hermana. Otro ejemplo sería el niño que hace algo reprobable y sus padres le castigan por ello. Esto genera en el niño cierta ansiedad asociada al temor a perder el cariño de sus padres. Para evitarlo, el niño reprime el impulso de hacer de nuevo aquello que fue motivo de castigo, con lo cual evita también la ansiedad correspondiente. También se considera que es el mecanismo por el cual el inconsciente borra eventos y pensamientos que serían dolorosos si se mantuvieran en el nivel conciente. Por ejemplo, el olvido del cumpleaños de un familiar fallecido que fue muy cercano y querido.
 DESPLAZAMIENTO: se refiere a que cuando no satisfacemos los instintos directamente, canalizamos los impulsos del inconsciente no aceptados, a otras conductas aceptadas. Mediante este mecanismo de defensa se traslada la reacción que se hubiera deseado expresar ante ciertos hechos adversos sobre otras personas u objetos. Esto permite que determinados contenidos permanezcan reprimidos, enmascarando para la conciencia del sujeto las implicaciones que verdaderamente tendrían. El ejemplo más común es el hombre que en su trabajo sufre la injusticia y los desplantes de un jefe dominante y no expresa su hostilidad hacia él, sino contra su esposa, cuando vuelve a su casa, donde manifiesta su irritabilidad y su agresividad por cualquier trivialidad. Otro ejemplo sería el de la estudiante que está furiosa con un profesor por un desacuerdo académico y descarga su agresividad sobre su comprensivo novio, evitando la ansiedad que surgiría si atacase realmente al profesor.
 NEGACIÓN: es el mecanismo de defensa por el que se rechazan aquellos aspectos de la realidad que se consideran desagradables. El individuo se enfrenta a conflictos emocionales y amenazas de origen interno o externo negándose a reconocer algunos aspectos dolorosos de la realidad o de las experiencias subjetivas que son manifiestos para los demás. En otras palabras, la negación es el desconocimiento o el rechazo total o parcial de una situación que provoca displacer. Un ejemplo claro de éste mecanismo de defensa es el de la persona que ha sido inicialmente diagnosticada por un médico con un cáncer terminal y busca otras numerosas opiniones médicas, cegándose al diagnostico inicial que le dio su doctor. Otro ejemplo es el caso de la negación que ocurre ante la muerte repentina de un cónyuge, un hijo u otro familiar cercano.
 RACIONALIZACION: es una forma de negación en la que, para evitar el conflicto o la frustración, se dan razones o se expresan argumentos que ocultan, justifican o encubren las fallas o las contrariedades. Mediante este mecanismo, el sujeto se defiende del efecto frustrante y trata de convencerse que, en el fondo, no deseaba aquello que no ha conseguido. Un ejemplo es el de una persona que después de varios saltos no logra alcanzar las uvas de la parra y exclama: "¡No importa, están verdes!". Otro ejemplo es el del joven que se siente frustrado por el desplante que le ha dado una muchacha de la que está enamorado y dice para sí mismo: "Ella no sabe lo que se pierde, ¡con la gran cantidad de mujeres que hay, incluso mejor que ella!". O el del empleado que aspira a un cargo que la empresa ha dado a otro compañero de su departamento. Cuando el empleado ascendido le dice: "Siento que me hayan elegido a mí pues, por antigüedad, te tocaba a ti ascender", el aludido contesta: "No te preocupes, mis aspiraciones son más altas". Otro ejemplo sería el de un estudiante que justifica el haber sido reprobado en un examen, alegando que “eran demasiados temas” de la materia que debía estudiar. También se puede mencionar como ejemplo el caso de una persona que es despedida de su trabajo porque no hacía sus labores correctamente. La persona se excusa diciendo que lo despidieron porque nunca le hizo “halagos” al jefe para quedarle bien y que por eso el jefe no lo quería. También podemos citar el ejemplo de un estudiante, a quien sus amigos dejan "plantado" para ir al cine, y éste afirma: “fue lo mejor, ya que necesito estudiar”.
FANTASÍA AUTISTA: el individuo se enfrenta a  conflictos emocionales y amenazas de origen interno o externo mediante fantasías excesivas que sustituyen la búsqueda de relaciones interpersonales, la acción más eficaz o la resolución de problemas. 

MECANISMOS DE DEFENSA  DESADAPTATIVOS.

 PROYECCION: es un mecanismo de defensa mediante el cual atribuimos o asignamos a otras personas aquellas emociones, vivencias o rasgos de carácter que deseamos desalojar de nosotros mismos por inaceptables. La proyección es un proceso, a veces sutil y otras veces muy evidente, de adscribir o imponer a otros los deseos que no se quieren reconocer en uno mismo. Todo lo que resulta placentero es aceptado como algo perteneciente al propio yo. Todo cuanto resulta desagradable, molesto o doloroso es sentido como ajeno al yo. La frustración desaparece cuando creemos que nuestros defectos, nuestras deficiencias y nuestros fracasos también los tienen los demás, o son los demás los causantes de esos fracasos, de esas deficiencias o de algo que no deseamos tener. Algunos ejemplos son los siguientes: las personas que piensan mal de otros creen que los demás también piensan del mismo modo; el pequeño comerciante que roba 50 gramos en cada kilo, cuando compra en otra tienda será el cliente más desconfiado; la persona que manifiesta: " No soy yo quien le tiene rabia, sino que es ella (la otra persona) que me tiene rabia a mí”. Otro ejemplo es el del niño que está mirando televisión con su madre. El niño le dice a su madre: "Mamá cambio de canal porque ésta película es de terror y "tú" tienes miedo”. También podemos citar el ejemplo de un estudiante de escasos hábitos de estudio, que afirma que su bajo rendimiento académico se debe al maestro, ya que no sabe enseñar.
 AGRESIÓN PASIVA: consiste en un mecanismo de defensa en el cual las personas agraden con su pasividad. Por ejemplo cuando un paciente no cumple cabalmente con las prescripciones del médico, las sabotea, se queja sin motivo de los efectos de los medicamentos, dice que el tratamiento no sirve y siempre tiene una excusa para sus actos pasivo-agresivo. Otro ejemplo sería el caso de una persona a la cual se le asigna una tarea o actividad y dicha persona posterga, retrasa o entorpece el cumplimiento de la actividad que le fue asignada.
 COMPORTAMIENTO IMPULSIVO (ACTING OUT): el término “Acting Out” se traduce al castellano generalmente como “paso a la acción” o “puesta en acción”. Consiste en explosiones de violencia ante circunstancias angustiantes que se nos escapan de control. El individuo se enfrenta a conflictos emocionales y amenazas de origen interno o externo a través de la acción impulsiva más que a través de reflexiones o sentimientos. En otras palabras, el sujeto traslada a la acción algo que no ha racionalizado previamente, que se escapa de su control debido al carácter angustiante del hecho que lo generó. Por ejemplo, algunas personas al perder la paciencia o disgustarse con otros, golpean una mesa, dan un portazo o empujan a la otra persona.
 DISTORSIÓN PSICÓTICA: constituye una patología mental y se presenta cuando el individuo evidencia una alteración en la capacidad de discernimiento o en su juicio acerca de la realidad. Por ejemplo, un paciente que siente que lo persiguen se aislará y encerrará en su habitación, se observará desconfiado y al sentirse amenazado podría tornarse irritable o agresivo. Una persona que se siente rechazada por personas significativas para él,  generará  una creencia patológica de ser él (o ella) mismo (a)  alguien muy importante y destacada. En psicopatología a este tipo de proceso se le clasifica dentro de los trastornos del contenido del pensamiento llamados delirios.
 NEGACIÓN PSICÓTICA: constituye una patología mental y se emplea cuando hay una total afectación de la capacidad para captar la realidad. Un ejemplo de negación psicótica, referida al cuerpo humano, es cuando el paciente manifiesta una negación de sus órganos o de su propio cuerpo: “no tengo estómago, me faltan los genitales, soy transparente”. O cuando el paciente, ante la muerte de un familiar, manifiesta: “no ha muerto, me engañan, lo veo y hablo con él”.
 PROYECCIÓN DELIRANTE: constituye una patología mental y está presente en los delirios alucinatorios y paranoides, por cuanto ocurre en el paciente una deformación o una falsa imagen de la realidad. Por ejemplo el paciente se cree rey, cree que es un enviado especial de Dios, que pertenece a otro planeta, que tiene veneno en la sangre, que no existe, que ve animales raros, que oye voces, que hablan de él, que lo persiguen, que lo quieren matar, que al ver un carro negro por ello ocurrirá una muerte de manera inminente e inevitable, que le hablan a través del televisor o le dan órdenes a través de la computadora, que lo espían mediante un satélite o que lo controlan mediante un chip que le insertaron en el cerebro.

Una vez leídos y analizados  estos mecanismos, es conveniente que el estudiante revise cual de ellos utiliza más frecuentemente  y observe si le son útiles para adaptarse a las condiciones ambientales o si por el contrario le son inútiles y causan, a la larga, mayores inconvenientes en su vida.

Los Mecanismos de Defensa descritos anteriormente son sólo algunos de los que la corriente Psicoanalítica ha estudiado y clasificado. Si usted desea investigar más al respecto, le recomendamos utilizar un buscador Web y colocar las siglas DSMIV y la palabra Mecanismos de Defensa.

lunes, 23 de noviembre de 2009

ESTRÉS Y ANSIEDAD

ESTRÉS Y ANSIEDAD

La palabra “estrés” se usó primero en ingeniería para designar el área de la estructura sobre la que se aplica la carga (Lazarus, 2000), de allí se aplicó a la fisiología, la psicología y la sociología por el médico Hans Selye, investigador de origen austro-húngaro.
En fisiología y Psicología estrés es la reacción ante una amenaza, a la que se le llama agente estresante o estresor.
Su función es preparar para la defensa: enfrentándose o escapando.
Hans Selye, en la Universidad McGill (Montreal)  inyectó diversos preparados a ratas de laboratorio y al realizarle el estudio de tejidos y órganos encontró que cualquier daño (inyección o trauma) que aplicara al animal provocaban siempre las mismas alteraciones, que incluían: hipertrofia de las glándulas suprarrenales, atrofia del timo, bazo y nódulos linfáticos y ulceras de estómago y duodeno. Lo cual significaba que cualquier agente estresante producía incremento de las hormonas esteroideas, de las catecolaminas e inhibía el sistema inmunitario.
Selye (1927) describió el Síndrome General de Adaptación. Situación en la que el organismo realiza una esfuerzo para adaptarse. Se desarrolla en 3 fases:
1. Alarma
2. Resistencia
3. Agotamiento
Alarma: se produce liberación de hormonas: adrenalina (catecolaminas) y  esteroides (cortisol) que aumentan la frecuencia cardíaca , la resistencia vascular , frecuencia respiratoria, el aporte y consumo de energía (glucosa)  y oxigeno por el músculo, etc. preparando al organismo para la acción.  Resistencia: se mantiene la alarma por algún tiempo para enfrentar la amenaza, produciendo tensión muscular, hipervigilancia, etc.
Agotamiento: las reservas  del organismo disminuyen,  lo que lo hace más susceptible a enfermedades en general e infecciones (herpes, ulcera gastroduodenal por Ej.) o a trastornos mentales (depresión, ansiedad, psicosis).
TRAUMA
Trauma. Lazarus (1999) identifica el trauma como una respuesta intensa de estrés, donde la persona es incapaz de funcionar sin ayuda, puesto que su integridad psicológica ha sido dañada. La persona entra en shock psicológico y queda aturdida.
La gravedad depende del tipo de suceso y los recursos psicológicos del individuo.
A N S I E D A D
La respuesta psicológica ante el estrés es la ansiedad, la cual desencadena mecanismos de defensa o de afrontamiento para hacer frente a las amenazas: reales o imaginadas.

ESTRESORES                                                                                                                                        A las situaciones o estímulos que provocan un estrés se les lama estresores
Los estresores pueden ser:
1. Únicos
2. Recurrentes
3. Continuos
4. Múltiples


1.Únicos:
a. Desastres naturales, como un terremoto,
b. Desastres      accidentales, como un volcamiento o incendio
c.  Desastres    provocados, como un atraco, secuestro, violación, etc.
 
2. Recurrentes:
a. Problemas económicos, para los finales  de mes muchas personas siempre se  quedan sin dinero  
b. “ “ estacionales, los agricultores que tienen problemas siempre por la misma estación del año 


3. Continuos:
a. Conflictos familiares
b. “ “ laborales
c. “ “ escolares
(“el mismo problema todos los días”)
4. Múltiples :
(“los mismos problemas todos las días” )

SÍNTOMAS
1. Motores
2. Vegetativos
3. Cognitivos
4. Emocionales
5. Conductuales

Síntomas motores:
Hipertonía muscular Temblor Tics
Dolor y pesadez muscular
Sensación de tensión Calambres
Inquietud motora: frotar manos, balanceo de miembros, etc.

Sínt. vegetativos:
Digestivos: garganta y boca secas, disfagia, dolor en epigastrio, pirosis, nauseas, cólicos, diarrea, etc.
Cutáneos: rubor o palidez, sudoración de manos y pies,.
Cardiovasculares: palpitaciones.
Respiratorios: sensación de ahogo, disnea, hiperventilación , alcalosis respiratoria con tetania. Tos.
Urinario: polaquiuria, disuria.
Neurológicos: parestesias, vértigo y mareos.
ETC.
Síntomas Cognitivos:
se percibe la situación de acuerdo a la personalidad y experiencias previas. Si no está preparado, anticipa dificultades o tiene ideas catastróficas.
La persona en situación de estrés va a dirigir su atención  selectivamente al agente estresor.
Puede tener ilusiones deformantes de la realidad.
Sínt. emocionales:
el estrés evoca fuertes emociones mediadas por la forma como se evalúa (cognición) al estresor.
La emoción más frecuente suele ser el miedo, pero puede ser la ira u otras emociones complejas: celos, vergüenza, etc.

Sínt. Conductuales:
la conducta está condicionada por la emoción predominante, si es miedo la conducta será evitación y escape, si es ira atacará.
Cuando la persona siente miedo y no puede escapar, se paraliza, se disocia, o tiene una sensación de despersona-lización e irrealidad.
 
CONSECUENCIAS
De no resolverse adecuadamente la situación estresante en plazo perentorio, pueden aparecer enfermedades psicosomáticas, problemas en la conducta social o Trast. por estrés.


Enfermedades  Psicosomáticas:
 Predisposición a padecer Enf. infecto-contagiosas.
 Hipertensión arterial.
 Infarto.
 Ulcera péptica.
 Colitis.
 Cáncer de mama
 Etc.
Consecuencias en la conducta social:
 Comunicación inadecuada.
 Bajo rendimiento
 Conflictos laborales
 Irritabilidad
 Aislamiento
 Abuso de sustancias
 Etc.
                         Trastornos por estrés     (F43 -CIE10)                   
  1.  Trast. por estrés agudo.
  2.  T. por E. Postraumático:     Agudo o Crónico
  3.  T. Adaptativo : Con estado  de ánimo depresivo. Con ansiedad o Con Trast. de comportamiento.         



Trastorno  por estrés agudo Producto de evento traumático intenso, que amenaza la vida o pone en riesgo la integridad personal (del paciente o de un ser querido)  que desencadena síntomas agudos de ansiedad, embotamiento, despersonalización o disociación . Dura de 2 días a 4 semanas.
Trastorno por estrés postraumático El acontecimiento traumático es reexperimentado persistentemente como recuerdos que provocan intensa angustia o pesadillas. Puede ser agudo, si dura menos de 3 meses o crónico si dura más..
Trastorno adaptativo Aparecen síntomas emocionales y/o conductuales en respuesta a un estresor identificable : Síntomas: malestar y deterioro de la actividad social o laboral. Puede ser con estado de ánimo depresivo, con ansiedad o mixto. No confundir con duelo.
El Trastorno adaptativo se puede complicar con otros trastornos mentales más o menos severos. Es posible que aparezcan cuadros depresivos o trastornos psicóticos, entre otros.
Diagnóstico diferencial de la ansiedad por estrés:
1) Enfermedad médica primaria
2) Efectos secundarios. de fármacos como simpaticomiméticos.
3) Drogas de abuso y síndrome Abstinencia.como cocaina, alcohol, abstinencia por benzodiazepinas.
4) Trastorno Ansioso primario.
1) Enfermedad médica primaria, como en angina de pecho, infarto, arritmias, broncoespasmo hipertiroidismo, etc.
ENFERMEDAD COMO AGENTE ESTRESOR
La enfermedad supone un estresor para la mayoría de las personas... Su impacto depende de: la personalidad, la edad, el tipo de enfermedad, el apoyo familiar, las condiciones socio -económicas y el trato que le ofrezca el personal de salud..
Personalidad del paciente
Una personalidad dependiente solicitará ayuda exagerada., uno muy independiente negará los síntomas, una pasivo-agresiva saboteará el tratamiento, etc.
Edad del paciente: los pacientes jóvenes suelen causar mas problemas que los adultos, mientras que los ancianos aceptan mejor el diagnóstico.
Tipo de enfermedad Las enfermedades del corazón y las respiratorias producen mucha angustia El cáncer genera depresión Las ETS culpa, vergüenza y negación. Las enfermedades crónicas, como la IRC, lupus, Artritis Reumatoide, etc generan emociones que van cambiando según el curso.
La familia es determinante en la tranquilidad del paciente y su recuperación. Familias conflictivas y ansiosas suelen retardar la mejoría.. La ganancia secundaria también se retrasa el alta..
Ya abordamos la importancia del trato que dispense el personal de salud y las condiciones del hospital ..
Recuperación : Normalmente cuando una persona mejora recupera su bienestar psicológico y social, pero hay raros casos en los que no resulta así. Existen personalidades que prefieren que se les siga tratando como enfermos. Ya los hemos señalado cuando abordamos la RMP .
Síndrome de Lázaro . Se trata de pacientes que habían sido deshauciados (por cáncer, SIDA, enfermedad mental grave, etc) y se recuperaron despues de algún tiempo prolongado, quedando con un sentimiento de vacio y soledad con dificultad para incorporarse normalmente a su medio socio-natural. Se han descrito incluso suicidios , ej. pacientes esquizofrenicos recuperados.
  
CUANDO EL PRONOSTICO DE UNA ENFERMEDAD ES MALO
Qué decir ¿Ocultar el pronóstico al paciente? ¿Comunicarlo crudamente? ¿Comunicarlo de forma individualizada? ¿referirlo al psicólogo o al psiquiatra?
Recomendaciones OMS (1993)
1. Tener un plan
2. Dar el control al paciente en cuanto a que monto se le da la información
3. Averiguar lo que él piensa y siente.
4. Dar tiempo
5. Ofrecer un plan de tratamiento.
Evitar falsas esperanzas
Antes de informar al paciente, el médico debe trazar un plan  ¿cuál es la mínima y la máxima información que se le va a dar de cara a las decisiones y a la seguridad del diagnóstico? Para trazar este plan de información debemos evaluar las condiciones psicológicas y sociales  del paciente, esto debería incluir: A) conocer los rasgos de personalidad,  si es una persona impresionable o si es mas bien sereno.  B) preguntar como ha respondido ante adversidades pasadas, si tarda en recuperarse de situaciones de pérdida o si se recupera pronto. C) evaluar si está presentando trastornos mentales en este momento D) evaluar el riesgo suicida. E) Conocer su entorno familiar y social, para saber el tipo de apoyo con que cuenta.
Permitir al paciente el control de qué y cuándo darle la información. El médico debe averiguar lo que el paciente piensa sobre su enfermedad (por ejemplo, que enfermedad cree que tiene y cuanto toleraría una enfermedad grave), cuales son las emociones y sentimientos al respecto y qué proyectos  tiene el paciente con su vida. Ver hasta que punto la enfermedad va a cambiar sus planes y como repercutirán en su estabilidad mental.    
Hay que darle tiempo para que procese la información que se le va dando para no sobrecargarlo. Si nota que las emociones lo están desbordando se hace una pausa en la información, esperar que asimile lo que se le ha dicho. Por ejemplo si notamos que está haciendo negación del problema (o esta usando otros mecanismos de defensa poco adaptativos) esperar a que se estabilice para poder continuar.
Siempre ofrecerle un plan de tratamiento, el paciente debe sentir que no se le va a abandonar y que estaremos atentos a sus  quejas, que aliviaremos sus dolores, que le daremos apoyo psicológico, etc.
Asegurarle que nunca se le va a dejar solo y que no se permitirá que sufra.
Nunca darle falsas promesas.
Toda la información sobre la enfermedad deben darla los médicos tratantes, pero pueden solicitar asesoría con profesionales del área.
Si el paciente presenta síntomas intensos de ansiedad, insomnio o ideas suicidas, solicite una interconsulta con psiquiatría.



ENFOQUE COGNITIVO DEL ESTRÉS
Richard Lazarus, psicólogo estadounidense (1922-2002), asegura que antes de que la  ansiedad (o cualquier emoción)  aparezca, la persona evalúa automáticamente y de forma inconsciente  lo que está ocurriendo y lo que le puede  suceder como consecuencia del hecho estresante. Desde este punto de vista las emociones como el miedo o la ira estarían mediadas por las cogniciones (pensamientos, recuerdos o imágenes), es decir, que nuestra respuesta emocional estará determinada por la evaluación que hagamos de la amenaza y nuestras posibilidades de solucionarlas, si creemos que la amenaza es grave o si evaluamos que no tenemos mecanismos para enfrentarla,  el impacto y estrés sería mayor que si pensamos que la amenaza no es de tanta importancia o si  creemos que disponemos de buenos mecanismos y recursos para enfrentarla.  Por lo tanto si nos preparamos para un acontecimiento estresante podríamos controlarlo mejor que si nos agarra por sorpresa.

E= Estresor
P= Pensamiento
Em= Emoción
C= Conducta.

                                     E-->P-->Em-->C

La situación estresora es valorada por el sujeto, de acuerdo con su experiencia y recursos, que podrá o no solucionar, y esa evaluación determinará la emoción consecuente que va a provocar una conducta congruente con dicha emoción. Por ejemplo, si la persona evalúa la situación como amenazante, la emoción que sentirá será miedo y la conducta puede ser la huida o el enfrentamiento.   
En el enfoque Cognitivo-mediador-relacional de Lazarus (1999) el dogma básico es que el estrés expresa una relación entre la persona y el medio, que requiere que se juzgue amenazante determinada situación y evalúe la disponibilidad de opciones de manejo de dicha situación.
Hay situaciones amenazantes que afectan de manera universal a todas las personas, como la amenaza a la vida o a la integridad física.  Como la situación de un desastre natural o un grave accidente. Aunque sabemos que han existido personas que han sabido enfrentar esta amenaza con estoicismo, como el caso de los pilotos de guerra japoneses de la segunda guerra mundial, que se lanzaban contra los barcos enemigos para hundirlos aun a costa de sus vidas.  Son personas que se han entrenado mentalmente para enfrentar esta situación y el honor por defender su patria está primero que su propia existencia física.
Hay situaciones amenazantes que afectan de manera relativa a muchas personas, como los problemas financieros, los problemas relacionados con el manejo del tiempo o con las relaciones familiares, etc. De acuerdo a los estudiosos del tema del estrés (Lazarus, Lupien, etc) estos problemas no afectan a todas las personas por igual, es decir que hay personas que sufren más intensamente ante el estrés y ello está relacionado con la personalidad y la preparación psicológica. Pero este tipo de estrés produce (y se calcula que se incrementará) una importante número de pacientes con enfermedades psicosomáticas y trastornos psicológicos, que representan una carga importante para los establecimientos de salud.

EDAD Y ESTRÉS
Los efectos del estrés van a ser diferentes de acuerdo a la edad de quien lo sufre. Los niños, a partir de los 6 a 8 meses, ya dan muestras somáticas y emocionales (tensión muscular, llanto, taquicardia, etc.) cuando son sometidos a "una amenaza". "Una amenaza" a esa edad puede ser un ruido fuerte (recuérdese el caso del pequeño Albert del experimento de Watson ). La ausencia  de la madre o la persona que lo cuidad produce manifestaciones de ansiedad en el lactante de 8 meses a 3 años ;  objetos o animales  que saltan ( o se mueven bruscamente)  y hacen ruido provocan asombro y miedo en estos bebes; maltrato físico  (pegar, pellizcar, empujar, etc.)  también produce manifestaciones ansiosas. Algunas  otras situaciones inesperadas o extrañas provocan también signos de ansiedad en los niños, por ejemplo una persona  familiar  de  una niña de 3 años,  le mostró su dedo meñique lleno de pintura azul (en Venezuela se pinta el dedo meñique cuando se vota) y la niña se puso a gritar llena de horror. Es que los niños tiene menos recursos cognitivos (obviamente) para enfrentar a las situaciones amenazantes y sus mecanismos de defensa están menos estructurados que los de los adultos.
El período de pubertad y adolescencia es considerado una situación de estrés.
Los niños sometidos a estrés frecuentes y prolongados  van a tener  mas posibilidad  de  presentar  rasgos de personalidad neurótica en su vida y a desarrollar mecanismos de defensa menos adaptativos.
Los  adultos mayores son más susceptibles que los mas jóvenes a las situaciones de estrés, tanto en el aspecto psicológico como en el somático. En el aspecto psicológico tienden a entristecer y/o deprimirse con las situaciones estresantes y en el aspecto somático, estas personas suelen desarrollar más trastornos psicosomáticos que los jóvenes.

SEXO Y ESTRÉS
Mujeres y hombres presentan algunas diferencias ante las situaciones estresantes y sus consecuencias. Las mujeres tienden a presentar más efectos emocionales que los hombres, entre ellos depresión y trastornos disociativos-conversivos, además son más vulnerables en la segunda mitad del ciclo menstrual, sobre todo los días previos a la regla.  También el embarazo y puerperio supones una condición de vulnerabilidad al estrés.
    Los hombres tienden a presentar,  mas frecuentemente, trastornos cardiovasculares (Infarto por ejemplo),  comportamientos violentos, consumo de alcohol y otras drogas.  

Recomendamos leer el tema Mecanismos de Defensa en este mismo blog.

ABORDAJE DEL ESTRÉS PSICOLÓGICO POR PARTE DEL MÉDICO

Es fundamental que el médico descarte primero la presencia de una enfermedad médica, es decir que se asegure que no se trata de una patología orgánica. Una vez que esto se descarte el médico debe comprender lo que le está ocurriendo a su paciente, evaluar los posibles detonantes del estrés, queremos decir los posibles estresores y las cargas cognitivas que se están produciendo en la personas, para así ayudarlas a entender lo que les está ocurriendo y de esta manera organizar sus ideas y emociones. Es un error muy frecuente por parte de muchos médicos conformarse con decirle al paciente: -no se preocupe, eso no es nada, solo tiene "un estrés",  ya que esto no resuelve el problema de fondo y confunde más al sujeto y a sus familiares. No es ético indicarles fármacos "naturistas" u otros procedimientos que no tengan una comprobada efectividad, ya que les hace perder tiempo, dinero y confianza. . 
La terapia cognitivo-conductual ha sido la técnica psicoterapéutica que ha mostrado mayor efectividad para prevenir y tratar el estrés. Pero existen otras técnicas que se han usado con éxito, por ejemplo la terapia de la conducta y recientemente las llamadas terapias de tercera generación. También es beneficioso entrenar a la persona en relajación muscular, en ejercicios  físicos  (caminatas, trote, natación, bailo-terapia, bicicleta). Las actividades religiosas han demostrado ser reconfortantes. 
El uso de fármacos ansiolítico (como las benzodiacepinas) solo se justifica si el paciente está desbordado por emociones negativas, como la ansiedad extrema, la ira incontenible o una profunda tristeza. 
En las últimas décadas se vienen  usando, para tratamiento de cuadros por estrés muy  intensos los Inhibidores de la re-captación de la serotonina (ISRS), pero aconsejamos al médico general que deje esta decisión a un médico experto en estos casos, ya que son fármacos de difícil manejo. 
En última instancia refiera al paciente a un psiquiatra o a un psicólogo  con entrenamiento clínico.       

Bibliografía
APA, DSM IV. Masson, Barcelona 1990
Castro, R. Taller para el control del estrés. Calabozo. 1991
Clark, D. Beck, A. Terapia cognitiva para trastornos de ansiedad. Ed. Desclée.Bilbao. 2012.
Lazarus, R. Estrés y emoción Manejo e implicaciones en nuestrta salud. Ed. Desclée. Bilbao 2000
López-Ibor,J. Lecciones de Psicología Médica. Masson. Barcelona. 1999
Rosales, J. Psicología de la Salud. Pirámide. Madrid 2004

domingo, 12 de julio de 2009

TRABAJO PRÁCTICO SOBRE EL DESARROLLO DE LAS FUNCIONES PSIQUICAS

Universidad Nacional Experimental Rómulo Gallegos.
Área Ciencias de la Salud.
Programa de Medicina.
Calabozo
Unidad Curricular: Psicología Médica.
Facilitadores:
Dra. Roselia Mora.
Lic. Sulaima Silmi.
Dr. Ricardo Castro.
Julio 2009.

TRABAJO PRÁCTICO SOBRE EL DESARROLLO DE LAS
FUNCIONES PSIQUICAS
(Valor 10%).

El presente trabajo práctico se realizará seleccionando unos sujetos de investigación (niños); se seleccionarán también dos estudiantes miembros del equipo (un entrevistador y un observador). El entrevistador será el encargado de realizar las indicaciones experimentales. El observador se encargará de tomar notas detalladas de los ejercicios realizados (puede designarse varios observadores para mayor precisión del registro). Los estudiantes deben presentar un informe grupal escrito con aspectos descriptivos de las observaciones sobre de los ejercicios planteados.
En el informe escrito deben identificar, para cada ejercicio, los siguientes datos:
 Nombre de la prueba o ejercicio;
 Fecha de realización;
 Iniciales del nombre del niño evaluado;
 Género o sexo del niño;
 Fecha de nacimiento del niño;
 Edad del niño (calculada en años y meses cumplidos; por ejemplo: 3 años 7 meses);
 Escolaridad (si corresponde al caso).

Ejercicios Prácticos

A.- Desarrollo de la Sensación y la Percepción.
Sujetos de investigación:
Un bebé de 4 (cuatro) meses.
Un niño de 1 (un) año.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Sensopercepción visual: Presentar al niño varios objetos de diferentes colores, formas y tamaños. En el informe se debe especificar qué objetos le fueron presentados al niño. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
2) Sensopercepción visual: Mostrar al niño ilustraciones de diferentes paisajes, objetos, animales. Mostrar fotografías de rostros humanos conocidos (madre, padre, hermanos) y rostros humanos desconocidos para el niño. Especificar en el informe cuales ilustraciones y fotografías le fueron presentadas al niño. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
3) Sensopercepción visual: Mostrar al niño ilustraciones o gráficos con figuras simples (sin muchos elementos visuales) e ilustraciones o gráficos con figuras abstractas o complejas (con gran cantidad de elementos visuales). Describir en el informe las características de las ilustraciones o gráficos presentados al niño. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
4) Sensopercepción auditiva: Presentar al niño varios sonidos diferentes (campana, música, la voz de la madre o cuidador, etc.). Describir en el informe los sonidos presentados al niño. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
5) Sensopercepción gustativa: Dar al niño un alimento dulce y uno salado. Indicar en el informe las características del alimento presentado (sopa, puré, compota, etc.). Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
6) Sensopercepción táctil: Dar al niño un leve pinchazo en la palma de la mano con la punta de un lápiz. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular. Observar la conducta del niño ante las caricias de la madre o cuidador(a). Anotar la reacción de cada niño en particular.
7) Sensopercepción olfativa: Observar la reacción del niño ante el olor de los productos utilizados para su baño y aseo (shampoo, jabón, colonia, etc.). Especificar en el informe el aroma presentado. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular. Observar la reacción del niño ante el olor del alimento que ingiere. Indicar en el informe el tipo de alimento que se observó comer al niño. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
8) Comparar las observaciones entre los dos niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.

B.- Desarrollo de la Atención.
Sujetos de investigación:
Un bebé de 4 (cuatro) meses.
Un niño de 1 (un) año.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Presentar al niño un objeto musical, preferiblemente que tenga también movimiento y luces. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
2) Presentar al niño varios objetos sencillos y estáticos de un mismo color y tamaño (pelotas, cubos, etc.). Mencionar en el informe las características de los objetos utilizados. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
3) Presentar al niño varios objetos contrastantes (diferentes formas, colores y tamaños).Indicar en el informe qué objetos fueron presentados. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
4) Presentar al niño de manera simultánea varios objetos tanto estáticos como con movimiento, sonido y luces. Indicar en el informe qué objetos fueron presentados. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
5) Comparar las observaciones entre los dos niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.

C.- Desarrollo de la Memoria.
Sujetos de investigación:
Un niño de 1 (un) año.
Un niño de 2 (dos) años.
Un niño de 6 (seis) años.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Presentar al niño ilustraciones, imágenes o fotografías de objetos, animales y personas conocidas (madre, padre, hermanos). Registrar en el informe cuáles imágenes fueron mostradas al niño. Preguntar al niño el nombre de la imagen que está viendo para determinar si la identifica. Anotar el tiempo que tarda en emitir la respuesta. Si no logra identificarlas, decirle al niño el nombre de la imagen que está viendo. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
2) Inmediatamente después del ejercicio anterior, distraer al niño con algún juego o juguete y transcurridos 2 (dos) minutos, preguntarle al niño si recuerda las imágenes que se le mostraron anteriormente. Pedirle que las mencione. Anotar cuantas y cuales recuerda y el tiempo que tarda en emitir las respuestas.
3) Comparar las observaciones entre los tres niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre los casos.




D.- Desarrollo del Pensamiento e Inteligencia.
Exploración del estadio Sensorio-motriz.
Sujetos de investigación:
Un niño de 8 (ocho) meses.
Un niño de 1 ½ (uno y medio) año.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Conservación sustancial del objeto: búsqueda activa del objeto desaparecido superando un obstáculo. En presencia del niño se esconde un objeto debajo de una caja ¨A¨ y luego se traspasa a otra caja ¨B¨ ante la vista del niño. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
2) Inicios de la coordinación medio-fin: Se le enseña al niño un juguete que tenga un cordón o cinta y se deja el extremo de la cuerda cerca del cuerpo del niño, donde él pueda verlo. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
3) Seguir la trayectoria del objeto: Desplazar por el piso una pelota o cualquier otro objeto o juguete. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
4) Imitación de los movimientos no visibles sobre el propio cuerpo (imitación diferida): Pedir al niño que haga “arepita, ojitos, viejita, gestos de adiós”, dar palmaditas o aplausos, besitos. Observar y anotar la reacción y conducta de cada niño en particular.
5) Comparar las observaciones entre los dos niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.
Exploración del estadio de las operaciones Concretas.
Sujetos de investigación:
Un niño de 4 (cuatro) años.
Un niño de 9 (nueve) años.
Evaluar a cada niño por separado.
6) Conservación de cantidades continuas (sólidos):
Materiales:
2 barras de plastilina de colores diferentes.
Preguntar al niño cuál color quiere. Cuando seleccione, realizar 2 pelotas con ambas plastilinas por separado. Preguntarle al niño si ambas pelotas están iguales. El niño tiene que reconocer la noción de igualdad para poder continuar. Luego, se le dice al niño: “Ahora, fíjate bien lo que voy a hacer con ésta pelota”. Estirar la pelota hasta hacer una salchicha. Preguntarle al niño: “Ahora quien tiene más, ¿tú o yo?”. Cualquiera sea la respuesta, se le pregunta al niño: ¿por qué?. Describir y anotar en el informe la reacción, conducta y respuestas del niño.
7) Conservación de sustancia:
Materiales:
2 vasos transparentes de la misma altura y anchura.
2 refrescos de color diferente y contrastantes (por ejemplo, colita y piña; coca-cola y naranja).
1 vaso alto y angosto.
Pedir al niño que selecciones cuál color de refresco prefiere. Luego que seleccione, llenar cada uno de vasos con un color de refresco diferente. Los vasos deben estar llenos a la misma altura. Preguntar al niño si ambos vasos tienen la misma cantidad de refresco. El niño tiene que reconocer la noción de igualdad para poder continuar. Luego, se le dice al niño: “Ahora, fíjate bien lo que voy a hacer; voy a echar tu refresco en este vaso” (se debe verter el refresco en el vaso alto y angosto). Preguntarle al niño: “Ahora quien tiene más, ¿tú o yo?”. Cualquiera sea la respuesta, se le pregunta al niño: ¿por qué?. Describir y anotar en el informe la reacción, conducta y respuestas del niño.
8) Correspondencia Biunívoca:
Materiales:
6 botellitas
10 vasitos.
Colocar las botellitas en línea recta y decirle al niño. “Ahora, fíjate bien, yo quiero que tú le pongas a cada botellita su vasito, para que cada botellita tenga su vasito (enfrente siempre). Preguntarle al niño: “Ahora, dime ¿hay más botellitas, más vasitos o la misma cantidad?”.Cualquiera sea la respuesta, se le pregunta al niño: ¿por qué?.
Luego, el entrevistador debe variar la disposición de las botellitas, separándolas más entre sí. Preguntarle al niño: “Ahora, dime ¿hay más botellitas, más vasitos o la misma cantidad?”. Cualquiera sea la respuesta, se le pregunta al niño: ¿por qué?.
Nuevamente se variará la disposición de las botellitas, esta vez, agrupándolas entre si (amontonándolas). Preguntarle al niño: “Ahora, dime ¿hay más botellitas, más vasitos o la misma cantidad?”. Cualquiera sea la respuesta, se le pregunta al niño: ¿por qué?.
Describir y anotar en el informe la reacción, conducta y respuestas del niño ante cada prueba.
9) Comparar las observaciones entre los dos niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.





Exploración del estadio de las operaciones Formales.
Sujetos de investigación:
Un niño de 7 (siete) años.
Un joven de 14 (catorce) años.
Evaluar a cada uno por separado.
10) Formular la siguiente pregunta: ¿Por qué crees tú que Simón Bolívar se dedicó a libertar América?. Transcribir textualmente en el informe la respuesta verbal emitida por cada uno de los entrevistados. Describir y anotar en el informe la reacción y conducta de cada uno de los entrevistados.
11) Comparar las observaciones entre los dos entrevistados de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.

E.- Desarrollo del Aprendizaje.
1) Elabore una conclusión, por consenso grupal, acerca de la adquisición del aprendizaje en los niños observados en los ejercicios anteriores y realice un cuadro comparativo por edades.
2) Según el criterio grupal, cuál(es) teoría(s) considera más importante(s) en cuanto a la explicación del desarrollo del aprendizaje humano. Justifique su respuesta.

F.- Desarrollo del Lenguaje.
Sujetos de investigación:
Un niño de 2 (dos) años.
Un niño de 6 (seis) años.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Prueba de vocabulario.
El entrevistador le dirá al niño: “quiero ver cuántas palabras conoces. Escucha atentamente y cuando diga una palabra, tú me dices lo que significa” Esta permitido decir: “¿Qué es…?” o “por favor, explícate un poco más” u otra frase semejante que no oriente al niño en la respuesta que debe dar.
Al niño de 2 años preguntar el significado de las 10 (diez) primeras palabras (en el orden en que se numeran).
Al niño de 6 años preguntar el significado de todas las palabras (24 en total. En el orden en que se numeran).
En el informe se debe transcribir textualmente la respuesta verbal emitida por cada uno de los niños entrevistados para cada una de las palabras formuladas. Describir y anotar en el informe la reacción y conducta de cada uno de los niños entrevistados durante la ejecución de ésta prueba.

Vocabulario
Lista de Palabras
1. Casa 9. Gasolina 17. Televisión
2. Sombrero 10.Zancudo 18. Mordisco
3. Zapato 11. Bicicleta 19. Enseñar
4. Tenedor 12. Decir 20. Ayudar
5. Paraguas 13. Carta 21. Fastidio
6. Columpio 14. Uña 22. Mañana
7. Edificio 15. Jugar 23. Cuadrado
8. Sol 16. Educado 24. Grande

2) Comparar las observaciones entre los dos niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.

G.- Desarrollo de la Emoción y Motivación. (En ésta actividad también se puede observar el desarrollo de la Personalidad y de la Socialización).
Ejercicio “A”.
Sujetos de investigación:
Un niño de 2 (dos) años.
Un niño de 6 (seis) años.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Observar, describir y anotar en el informe la reacción y conducta del niño ante cada una de las siguientes situaciones:
a) Cuando se mira frente al espejo.
b) Cuando está con los padres.
c) Cuando está con los hermanos.
d) Cuando juega sólo (con objetos, juguetes).
e) Cuando juega con otros niños de su propio género o sexo.
f) Cuando juega en un grupo mixto (niños y niñas).
2) Comparar las observaciones entre los dos niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.
Ejercicio “B”.
Sujetos de investigación:
Un niño de 5 (cinco) años.
Un niño de 9 (nueve) años.
Evaluar a cada niño por separado.
3) El entrevistador debe contar al niño la historia o cuento “Caperucita Roja” y preferiblemente mostrarle las ilustraciones del cuento. Previamente, el equipo debe diseñar algunas preguntas, utilizando palabras que puedan entender cada uno de los niños de acuerdo a su edad. Las preguntas serán formuladas al niño por el entrevistador.
Marco referencial para la elaboración de las preguntas:
g) ¿Quiénes son los protagonistas del cuento y cuál es la actuación cada uno de ellos?.
h) La razón del comportamiento de cada uno de los personajes del cuento.
i) ¿Qué hubiese pasado si los protagonistas del cuento hubiesen tomado otras decisiones?.
j) ¿Que deberían haber hecho los protagonistas del cuento y por qué?.
En el informe se debe transcribir textualmente las preguntas diseñadas por los miembros del equipo y las respuestas verbales emitidas por cada uno de los niños a las respectivas preguntas.
4) Describir y anotar en el informe la reacción y conducta de cada uno de los entrevistados.
5) Comparar las observaciones entre los dos niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre ambos casos.

G.- Desarrollo de la Psicomotricidad.
Ejercicio “A”.
Sujetos de investigación:
Un Recién Nacido (indique el tiempo de nacimiento).
Un bebé de 4 (cuatro) meses.
Un niño de 1 (un) año.
Un niño de 1½. (uno y medio) año.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Observar y describir el desarrollo psicomotor de los niños de las referidas edades con respecto a las siguientes variables:
• Control del cuerpo.
• Postura.
• Adquisición de destrezas motrices.
• Talla y peso.
• Control de esfínteres.
• Esquema corporal.
2) Describir y anotar en el informe la conducta de cada uno de los niños observados.
3) Comparar las observaciones entre los tres niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre los casos.
Ejercicio “B”.
Sujetos de investigación:
Un niño de 2 ½ (dos y medio) años.
Un niño de 4 (cuatro) años.
Un niño de 7 (siete) años.
Evaluar a cada niño por separado.
1) Suministrar al niño una hoja blanca tamaño carta y un lápiz de grafito. Pedir al niño que realice el dibujo de una persona. El entrevistador no debe ayudar al niño en su ejecución. Identificar el dibujo con las iniciales y edad del niño, indicar la lateralidad (derecho o zurdo) una vez que éste concluya su realización.
Nota: Si el niño más pequeño (2 ½ años) manifiesta espontáneamente que no sabe dibujar, animarlo para que realice el dibujo, sin ejercer presión emocional sobre él. Si insiste en que no sabe hacerlo, agradecerle su esfuerzo y suspender la prueba. En ese caso se debe anotar las observaciones realizadas en el intento por parte del niño (forma de agarrar el lápiz, la hoja, etc.). Por otra parte, si el niño manifiesta que no sabe dibujar una persona, pero sabe dibujar “otra cosa”, preguntarle qué quiere dibujar y dejar que espontáneamente lo haga. Anotar en la misma hoja donde el niño realizó su dibujo lo que dijo que representaba (“qué es o quién es”).
2) Suministrar al niño una hoja blanca tamaño carta y un lápiz de grafito. Pedir al niño que escriba la palabra “mamá”. El entrevistador no debe ayudar al niño en su ejecución. Identificar la escritura con las iniciales y edad del niño, una vez que éste concluya su realización.
Nota: Igual procedimiento que el anterior para el caso del niño más pequeño si manifiesta que no sabe escribir.
3) Describir y anotar en el informe la reacción y conducta de cada uno de los niños entrevistados.
4) Comparar las observaciones entre los tres niños de diferentes edades y realizar una conclusión sobre el desarrollo evolutivo entre los casos.
Observación: debe anexarse al informe las muestras de los dibujos y caligrafía realizadas por los niños.

viernes, 19 de junio de 2009

CONCEPTO DE SALUD MENTAL


 
Guía Instruccional.
Unidad Curricular: Psicología médica.
Tema: concepto de salud mental
Material Recopilado por los Facilitadores: Lic. Sulaima M. Silmi P
Dr. Ricardo Castro
Calabozo, Enero 2009.
CONCEPTO DE SALUD MENTAL
Es difícil dar con una definición de salud mental que se acepte de manera universal. La idea generalizada que se tiene es que la salud mental es un estado de equilibrio entre la persona y su entorno que garantice la participación social, laboral o escolar y alcance una calidad de vida adecuada.
La O M S no reconoce una definición oficial, ya que las definiciones propuestas han estado contaminadas con aspectos ideológicos, religiosos, económicos o políticos.
El concepto que propone la Federación Mundial para la Salud Mental, en su primer congreso internacional de 1985, nos parece amplio y sobretodo muy práctico:
“Cuando hablamos de felicidad, paz, satisfacción, goce, bienestar, placer, estamos refiriéndonos a salud mental.
La salud mental se refiere a la manera como cada uno de nosotros nos relacionamos con otros seres en la familia, en la escuela, en el trabajo, en las actividades de recreación, en el contacto diario con nuestros iguales y en general con la comunidad, y a la manera de cómo nos relacionamos con nosotros mismos.
Comprende la manera en que cada uno armoniza sus deseos, anhelos, habilidades, ideales, sentimientos y valores morales con los requerimientos para hacer frente a las demandas de la vida.
La salud mental depende de:
1) Como nos sentimos frente a nosotros mismos.
2) Como nos sentimos frente a otras personas.
3) En qué forma respondemos a las demandas de la vida.
No existe una línea divisoria que separe con precisión a la persona mentalmente sana de la que no lo es. En verdad existe toda una gama de grados de salud mental y no hay una característica singular que pueda tomarse aisladamente como evidencia de que la posee. De otra parte, tampoco la ausencia de uno de esos atributos puede admitirse como prueba de enfermedad mental. Más aun nadie tiene todo el tiempo todos los rasgos de una absoluta salud mental.
Entre las características de la persona mentalmente sanas se encuentran las siguientes:
I – ESTAN SATISFECHAS CONSIGO MISMAS
ü No están abrumadas por sus propias emociones: rabia, temores, amor, celos, preocupación, miedo o sentimientos de culpa.
ü Pueden aceptar sin alterarse las decepciones de la vida.
ü Tienen una actitud tolerante, despreocupada respecto a la propia persona y a los demás, y son capaces de reírse de si mismas.
ü Ni subestiman ni sobrevaloran sus habilidades.
ü Aceptan sus propias limitaciones.
ü Se respetan a sí mismas.
ü Se sienten capaces de enfrentar la mayoría de las situaciones cotidianas.
ü Derivan placer de cosas simples de la vida.
II – SE SIENTEN A GUSTO CON OTRAS PERSONAS
ü Son capaces de amar y tener en consideración los intereses de los demás.
ü Sus relaciones personales son satisfactorias y duraderas.
ü Les gusta confiar en los demás y que los otros confíen en ellos.
ü Respetan las múltiples diferencias que encuentran en la gente.
III – SON CAPACES DE SATISFACER LAS DEMANDAS QUE LA VIDA LES PRESENTA.
ü Enfrentan sus problemas a medida que se van presentando.
ü Aceptan sus responsabilidades.
ü Modifican su ambiente cuando esto es posible y se ajustan a él cuando es necesario.
ü Planifican su futuro, al que enfrentan sin temor.
ü Tienen mente abierta a nuevas ideas y experiencias.
ü Hacen uso de sus dotes y aptitudes.
ü Se fijan metas ajustándose a la realidad.
ü Son capaces de tomar sus propias decisiones.
ü Derivan satisfacción en poner su mejor esfuerzo en lo que hacen.
Recomendamos la lectura del articulo EL CONCEPTO DE SALUD MENTAL EN PSICOLOGÍA HUMANISTA-EXISTENCIAL de la Lic. Valeria Carranza de la Universidad Católica de Bolivia, el cual hace una revisión amplia de los conceptos de salud mental.

jueves, 18 de junio de 2009

CONCEPTO Y CAMPO DE LA PSICOLOGÍA MÉDICA.

 

Guía Instruccional.
Unidad Curricular: Psicología médica.
Tema: Campo de la psicología médica.
Material Recopilado por los Facilitadores: Lic. Sulaima M. Silmi P
Dr. Ricardo Castro
Calabozo, Enero 2009.
PSICOLOGÍA MÉDICA
 
CONCEPTO Y CAMPO DE LA PSICOLOGÍA MÉDICA.
El médico, permanentemente, tiene que resolver problemas en el ejercicio de su profesión que no tienen nada que ver con los componentes biológicos que ha aprendido. Por ejemplo atender a una madre incómoda, que pregunta si su hijo puede seguir estudiando a pesar del diagnóstico que le acabamos de dar; informarle a un paciente que tiene una enfermedad incurable y/o mortal; entender cómo una sustancia sin efecto fisiológico puede curar; cómo una ruptura amorosa puede provocar la ceguera de un paciente o un infarto al miocardio; aceptar que un paciente no crea en nuestra “omnipotencia científica” y no se cure, a pesar de indicarle el tratamiento preciso; calmar a un padre angustiado, a cuyo hijo menor lo encontraron involucrado en una actividad sexual con un amiguito, etc.
Resolver estos problemas, por cierto incómodos para muchos médicos, resulta, hoy día, i n e l u d i b l e para un profesional graduado en una universidad moderna, en cuyo diseño curricular de la carrera un buen porcentaje está dedicado a la salud mental.
De esto se trata esta materia que aquí nos ocupa. De entender, desde la posición de un médico con visión holística, a la persona que sufre y de cómo podemos ayudarla más allá de los tratamientos somáticos. Para ello es necesario entendernos a nosotros mismos en nuestra tarea de curadores (y curanderos) y de comprender el fenómeno de la interconexión psicológica con el paciente, incluyendo el poder sanador de esta interconexión.
Por ello vamos a estudiar temas como la evolución de la personalidad, modos de reaccionar a las vivencias, las enfermedades como experiencia psicológica, la psicología del enfermo y su comprensión, la relación médico-paciente como factor de curación, el comportamiento del médico (sus palabras y mímica) como factor iatrogénico, las bases orgánicas del comportamiento, entre otros temas. Es decir: la CAPACITACIÓN PSICOLOGICA DEL MÉDICO.
Incluye esta capacitación cambiar algunas actitudes y motivaciones inconvenientes para la práctica clínica, de modo que el futuro médico se vuelva permeable, sensible, perspicaz, sintónico, objetivo, amplio, sincero, asertivo, seguro, sereno, maduro, cordial, humilde, paciente, prudente, tolerante…. en sus relaciones humanas y fundamentalmente en sus relaciones con los pacientes. En síntesis, prepararse psicológicamente para el ejercicio de la medicina.
La psicología médica se nutre de las corrientes del pensamiento de la psicología general (ya estudiadas en segundo año), de la psicopatología, de la psiquiatría y de la sociología. Pero la psicología médica estudia fundamentalmente al ser humano que consulta por que ha perdido su salud, no es su misión estudiar las enfermedades mentales (de eso se encarga la psiquiatría), aunque en algunas oportunidades se superpongan los temas de estudio de estas disciplinas.
La psicología médica es una ciencia muy reciente, sus orígenes los conseguimos por las décadas de los sesenta a setenta, cuando se le confundía con la psicología general o se le tenía como introducción a la psiquiatría. Hoy tiene un propósito bastante definido, aunque heterogéneo.
El profesional que practica la psicología médica es el médico-clínico. El profesional que práctica la psicología es el psicólogo. Y el que práctica la psiquiatría es médico-psiquiatra.
El clínico médico ha practicado la psicología médica de forma empírica desde siempre, muchas veces sin advertirlo y sin proponérselo, otras veces a pesar de que él mismo no lo ha querido; ya que la psicología médica es inseparable del ejercicio clínico, inmanente a su práctica. Está basada en el desarrollo de una relación personal entre el enfermo y su médico, abundante en impresiones personales, en subjetividades, sin un esquema predeterminado, rica en creatividad y estética, cabalgando entre la técnica y el arte.
La medicina científico-natural ve a la enfermedad como un organismo que ha perdido su equilibrio por noxas biológicas, estudia ese organismo, combate las noxas de manera objetiva. La psicología médica se ocupa más de la persona enferma que necesita comprensión. Ambos tipos de medicina se complementan y un médico no puede pretender desligarse de ninguna de las dos. Deben ser inseparables.
El médico puede afanarse en hallar siempre una enfermedad tangible concreta, aunque en muchas oportunidades, después de hacer exámenes clínicos y paraclínicos no descubra esa patología orgánica que busca, sin advertir que dejó de investigar los problemas humanos de su paciente (como si de un perrito se tratase), por que ignora que son importantes o por miedo a descubrir un problema que no sabrá solventar. A esta forma de atención la llamaremos “medicina veterinaria” o modelo eminentemente técnico.
Otro tipo de médico, generalmente con mala formación técnica, intentará abordar sus pacientes con modelos pseudocientíficos, recurriendo a técnicas no comprobadas científicamente y exagerando los consejos personales y familiares, ya que al no tener suficientes conocimientos científicos intenta rellenar esos vacíos con elementos mágicos. A esta forma la llamaremos
“medicina ficción”.
Una tercera forma de ejercer la clínica es integrando los aspectos científico-naturales, que son solo la mitad de la medicina, con los aspectos científico-humanistas, que son la otra mitad. A esta forma la llamaremos medicina ideal.
El Dr. Ruy Pérez Tamayo en su libro de la magia primitiva a la medicina moderna explica que “hay 4 maneras o estilos de de ejercer la medicina: 1) con atención rigurosa a las reglas científicas, 2) con gran cariño y apoyo emocional a los seres humanos afectados, 3) con una mezcla saludable de 1 y 2, y 4) con ignorancia científica, despego emocional e impaciencia burocrática. Aunque estos 4 tipos de médicos han existido siempre y existen hoy…. Desde hace 25 siglos persiste vigente el aforismo hipocrático sobre la verdadera naturaleza de la acción médica:
Curar algunas veces, ayudar con frecuencia, consolar siempre.”
PERSONALIDAD EN MEDICINA. ENFERMEDAD Y SER HUMANO ENFERMO.
Cada ser humano tiene una forma particular de enfermar, cada uno de nosotros siente la enfermedad a su manera, esto es debido a que cada quien tiene una forma de pensar, sentir, actuar, evaluar los síntomas, percibir los dolores. No existen dos seres humanos que tengan personalidades idénticas y es por ello que no existan dos enfermos iguales. Las enfermedades tienen un patrón clínico que le es característico, pero la forma de percibirlo, de sentir la vivencia de estar enfermo y expresarlo es especial para cada ser.
En nuestra experiencia familiar, con seguridad, habremos podido observar como cada miembro de nuestra familia expresa sus dolencias de una manera típica. Para alguno estar enfermo es una catástrofe, para otro es algo “normal”. Fulano se queja de forma exagerada, con dramatismo, mientras que mengano lo hace con estoicismo y zutano se aísla y no quiere que nadie lo vea… en fin, hay una y mil formas de vivir la enfermedad, dependiendo de la personalidad.
Existe un aforismo en medicina que dice “no hay enfermedades sino enfermos” atribuido a Claude Bernard, sobresaliente médico e investigador francés de mediados del siglo XIX, que sintetiza en dos frases la originalidad de cada paciente, su manera de reaccionar y expresar “su” enfermedad, lo cual nos debe hacer reflexionar en este sentido. Este autor después de estudiar las enfermedades desde sus aspectos anatómico y fisiológico entendió que es necesario estudiar los aspectos de la personalidad del enfermo para poder ayudarlo cabalmente.
Luwdwig Krehl, de la escuela clínica alemana, también entendió que era necesario estudiar la personalidad del ser humano enfermo ya que la clínica basada solo en la fisiología y anatomopatología dejaba muchas cuestiones trascendentes sin responder.
Estos clásicos de la medicina europea, entendieron la importancia de la personalidad del paciente al notar que cada persona responde de manera original ante la noxa causante del morbo.
Clásicamente, en medicina, se entiende a la personalidad como una síntesis dinámico-evolutiva de factores biológicos, psicológicos y sociales que se integran en un ser y lo caracterizan, haciendo que sea único, con cualidades que lo diferencian de los demás, que hace que piense, sienta, actúe (y enferme, agregamos nosotros) de forma constante y estable (Mateo Alonso, citado por Amarista).
Para la medicina la personalidad esta compuesta de manera indivisible, por elementos biológicos, psicológicos y sociales.
Tratemos de ejemplificar, con casos clínicos reales escogidos de nuestra experiencia, este aserto:
Caso D W: paciente masculino de 30 años, comerciante, casado con dos hijos. Personalidad premórbida caracterizada por apego a las normas sociales, responsable, emprendedor, con aspiraciones de superarse social y económicamente; estaba saludable y es de contextura atlética. Se ve involucrado en un hecho delictivo y lo condenan a 13 años de cárcel, posterior a lo cual presenta un cuadro de estupor, pérdida de peso y mutismo.
Caso T M: paciente femenina de 14 años, quien posterior a accidente de transito queda con parálisis de ambos miembros inferiores, por lo que no pudo continuar asistiendo a las clases de baile que estaba recibiendo. La púber es muy extrovertida, sociable, coqueta y aspira ser periodista. Posterior a la paraplejia de sus miembros inferiores presentó una depresión, sufrió una osteomielitis e intentó suicidarse.
Caso L C: paciente femenina de 27 años, dedicada al comercio sexual desde la pubertad. Es miembro de una familia desintegrada, con ausencia de padre, con mucha dificultad económica desde su infancia. Presenta SIDA. La paciente rechaza el diagnóstico y no quiere someterse al tratamiento.
Caso N H: paciente masculino de 70 años, llanero, de carácter dominante, con infarto al miocardio masivo, disneico, cianótico. Poco antes de morir le pregunta el médico: “¿Cómo se siente?” A lo que el paciente responde, casi sin poder hablar, levantando el puño: “¡como un rolo doctor!”
Vistos de esta manera resulta evidente la relación que existe entre la personalidad y la forma de enfermar que tenemos los seres humanos. Lamentablemente muchos médicos no tienen este conocimiento y dejan de indagar sobre la personalidad de su paciente, perdiendo de esta manera la oportunidad de entenderlo mejor y darle un tratamiento cabal.
Resulta obvia la trascendencia que tiene para el médico el estudio de esta materia.
De poco sirve al médico conocer la patología, los diagnósticos y la farmacología sino entiende (y siente) al paciente en su relación con su grupo, sus creencias, sus afectos, sus “porqués” y sus “paraqués”. Si no entiende la importancia de su imagen como sanador en la mente del paciente.
Referencias Bibliográficas:
Amarista F.; Guzmán, A. Kerdel, O. (1981) Manual de Psicología Médica (2ª Ed) Caracas, Editorial carhel c.a.
Fernández, A. (1974) Psicología médica y social (2ª Ed) Madrid. Editorial Paz Motalvo.
Gil, J. (2004) Psicología de la salud (1ª Ed) Madrid. Pirámide.
Rios, P. (2006) PSICOLOGIA la ventura de conocernos (2ª Ed.) Caracas. Editorial texto.
Uriarte, V. (2005) Psicofarmacología (5ª Ed) México, E. trilllas.